lunes, 30 de noviembre de 2015

Como elegir un novio(a) sabiamente



Las relaciones de noviazgo pueden ser complicadas. De hecho, como pastor de jóvenes, en muchas ocasiones he tenido que acompañar a más de un corazón herido a causa de una ruptura emocional.

Sin embargo, con todo y esto, estoy en contra de satanizar las relaciones de noviazgo.

Claro, algunos principios de sabiduría son recomendables.

Especialmente con respecto a la edad. Si eres un adolescente y estás en el colegio, pues es mejor estudiar y tener muchos amigos.

Ahórrate quebranto en el corazón y mucho, mucho, muchísimo drama, drama, drama.

Es normal tener un "crush" en el colegio. Es normal sentir la sensación de caminar en el aire cuando esa persona te corresponde. Pero, puede ser peligroso alimentar ilusiones que después te causarán dolor.

No pretendo decir que todos los adolescentes son un montón de inmaduros subhumanos que no tienen derecho a tener novio. Sino que, simplemente, en la adolescencia, la madurez de hormonas no equivale a la madurez de emociones.

El tiempo vendrá. Yo sé. Sueno como viejo. Y son exactamente las palabras que mis papás me decían. Y ¿saben qué? ¡Tenían razón!

Ahora, por otro lado si ya estás en la temporada de vida apropiada para iniciar una relación de noviazgo, creo que estos tres consejos te pueden ayudar al momento de buscar novio (a):

1. Busca carácter, no sólo carita

“Que la belleza de ustedes no sea la externa…Que su belleza sea más bien la incorruptible, la que procede de lo íntimo del corazón…” – 1 Pedro 3:3

En mi país hay un dicho que dice: “Es mejor un feo que te diga: “Vení comamos” a un guapito que te pregunte: “¿Qué comeremos?”

Traducción: es mejor un “feo” trabajador que un “guapo” holgazán.

Esto no significa que buscarás a alguien a quien no encuentres atractivo(a). Sino que, aprende a valorar más su integridad, honestidad y su pasión por Jesús en lugar de como se mira con ese vestido rojo o como luce sus abdominales de acero. 

Cuando la gravedad le juegue la mala broma de hacer su efecto en su cuerpo: ¿Qué es lo que hará que permanezcas con esa persona? Una buena manera de saber si tu novio(a) es  "materia prima para el matrimonio" es hacerte esta pregunta: Si tuvieras hijos, ¿quisieras que ellos tuvieran los hábitos y el carácter de tu novio(a)?

2. Asegúrate que ambos sean de la misma fe

No estéis unidos en yugo desigual con los incrédulos, pues ¿qué asociación tienen la justicia y la iniquidad? ¿O qué comunión la luz con las tinieblas? – 2 Corintios 6:14

Si eres cristiano, no tengas relaciones de noviazgo con inconversos. No, no eres mejor que los inconversos. No, no significa que tengas que comportarte de manera arrogante. Y no, tampoco vas a dejar de hablarles a tus amigos no cristianos. Pero, no existe ninguna comunión entre la luz y las tinieblas.

 Deja de pensar que tú lo vas a convertir. Tú no eres la tercera persona de la Trinidad. No eres el Espíritu Santo. No puedes cambiar a nadie.

¿Dios puede hacer la obra? ¡Claro que sí! Pero, si tal es el caso, deja que Él primero obre entonces. Mira, si de veras consideras pasar el resto de tu vida con una persona inconversa: piensa en tus hijos. 

El pastor J.D Grear lo pone así: "El impacto más grande en la vida espiritual de tus hijos será la persona con quien te cases. ¿De veras quieres que alguien que no comparta tu fe sea la influencia formativa más grande para ellos? ¿Te das cuenta de lo increíblemente egoísta que eso es--sacrificar el alma de tus futuros hijos en el altar de tus pasiones cortas?"

 3. No ignores el consejo de la gente mayor

 "Escucha el consejo, y recibe la corrección, Para que seas sabio en tu vejez.”- Proverbios 19:20

Un error común al momento de elegir un novio (a) es pensar que es "un asunto sólo mío." 

De hecho, algunas de las frases más populares que he escuchado son: 

"lo único que importa es que lo amo"
"mi familia no se tiene que meter"
"sólo somos tú y yo contra el mundo" *esta me causa náuseas*

Es cierto, al final eres tu quien toma la decisión. Pero, es muy sabio apreciar el consejo de las personas que te aman. Estar enamorado puede nublar el pensamiento. Permite que otras personas sabias y mayores conozcan a tu novio (a) y pregúntales su opinión. Puede que ellos vean algo que a ti se te está escapando. Es una mala señal cuando tu relación de noviazgo no le agrada a las personas mayores que te aman. Preséntala a tu pastor, a tu líder de jóvenes, a tus hermanos en la iglesia.

¿Y tú? ¿Cuales son algunos de tus consejos o recomendaciones? ¡Me gustaría saberlos!

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-Luís Luna Jr.
Pecador rescatado por gracia. Hijo eternamente amado por Abba.


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